Jimaní es la capital de la provincia Independencia en la República Dominicana, y es la segunda ciudad más grande de esta provincia ubicada al oeste del país. Se encuentra apenas a 280 kilómetros de Santo Domingo.

Su nombre es de origen taíno. «Ximaní» era un cacique del caicazgo de Jaragua quien dominaba estas tierras.

Los primeros pobladores de Jimaní provinieron de comunidades de la región suroeste como Neyba, Duvergé, Azua y Barahona, formando la populosa comunidad conocida como Jimaní Viejo. La población presentaba evidencia de la mezcla de razas y culturas provenientes del contacto con los inmigrantes haitianos que se casaron con dominicanas y dominicanos.

Para la década de 1930, pertenecía a la provincia de Neyba, que más adelante recibió el nombre de Bahoruco.

Debido a su ubicación fronteriza, Jimaní fue un punto estratégico en la «dominicanización» del tirano Rafael Leonidas Trujillo, resultando en el genocidio de miles de haitianos.

En 1943, se elevó a la categoría de Distrito Municipal perteneciente a la común de La Descubierta.

En 1948, Jimaní se convirtió en un municipio, y Trujillo quería convertirla en una de las ciudadas más bellas de sur de la República Dominicana, autorizando la construcción de muchos edificios de concreto para soldados y funcionarios traídos del interior del país para asumir funciones públicas.

La agricultura y el comercio con Haití representan las principales actividades economicas de este municipio. Su mercado al aire libre que opera en la frontera con Haití atrae a miles de personas de comunidades alrededoras y distantes. El mercado tambien es visitado por turistas extranjeros para observar el comercio y la relación intercultural entre dominicanos y haitianos.