PiojosSi tus hijos se están quejando de alguna picazón en sus cabezas y se están arrascando con demasiada frecuencia, es muy probable que ellos estén infestados de piojos. Estas pequeñas pestes que miden pocos milímetros, se alimentan de la sangre que chupan de la piel de las personas. Se reproducen bastante rápidos y en grandes cantidades, y se transmiten por contacto directo entre las personas.

Para confirmar la presencia de piojos, revísalos cuidadosamente en un lugar bien alumbrado y péinenlos con un cepillo o un peine de dientes apretados sobre un paño blanco. Notarás enseguida que los piojos y sus huevos caerán al paño como puntitos de caspa.

Prevención

– Revisa la cabeza de tus hijos con regularidad.

– Lávales el cabello cada dos o tres días y asegúrate que se peinen diariamente.

– Mantén limpios los peines y cepillos de tu hogar.

– Enséñales que no deben compartir los peines y cepillos con sus amigos o compañeritos de clase.

– Si tus chicos están infestados, notifica a los padres y maestros para prevenir el contagio a otros niños.

– Desinfecta sus ropas y las sabanas con agua caliente, y limpia las alfombras con insecticida.

Tratamiento

– Notifica al farmacéutico sobre un producto insecticida y como debe ser aplicada.

– Moja el cabello seco con el producto, aplicando con cuidado detrás de las orejas y en la nuca.

– Deja que el producto trabaje el tiempo indicado según las instrucciones del farmacéutico o la etiqueta y luego lavar el cabello con champú.

– Al finalizar el lavado, retiraras los huevos presentes en el cabello con un peine. Puedes también hacerlo con tus manos, apretándolas entre el índice y el pulgar y deslizándolas hasta la punta del pelo.