Trabajar desde casa puede parecer tan tentador como aterrador, de hecho, hoy día es uno de los tipos de trabajo más realizados con el aumento de los emprendedores, quienes se enfrentan a muchas ventajas por la flexibilidad de horarios, pero también tienen sus desventajas cuando el tiempo, el ambiente y la organización no se convierten en el mejor aliado.

Te has cuestionado sobre ¿que tan productivo puedes ser? sobre todo cuando los qué haceres domésticos e incluso los niños dependen de ti? Esto representa un gran dilema y requiere de mucha disciplina para lograr tener un día productivo tanto en lo laboral como en lo personal, sin colapsar.

Aquí te ofrecemos consejos útiles para salir airoso día a día trabajando desde casa:

– Lo primero es preparar un espacio de trabajo confortable y sin distracciones.

– Establecer un horario de trabajo y esforzarte por llevarlo a cabalidad, creando durante el día espacios para dedicar a los niños, si los hay, y otros para las responsabilidades de la casa (algunos consejos: cocinar interdiario o el día anterior, especificar días para el lavado de ropa, aseo de la casa, etc).

– Es importante indicar un horario para finalizar las labores, esto te permite incluir en el día las responsabilidades del hogar, las actividades de los niños y tus prioridades personales.

– Dentro de la planificación de cada día, lista aquellas tareas prioritarias para realizar durante las primeras horas del día.

– Aunque para muchos resulte cómodo trabajar en pijama, es importante hacerle sentir al cuerpos y la mente que has salido de la cama, por tanto, vestirse para iniciar las labores es imprescindible, talvez no como si fueses a la oficina, pero nunca trabajar en pijamas.

Toma pequeños descansos, para colar y tomarte un café, estirar el cuerpo, verificar de forma breve las redes sociales e incluso hacer una corta llamada, cómo si estuvieses en la oficina. Estos breaks son ideales planificarlos entre la terminación de tareas, así no te distraes ni interrumpes la creatividad.

– Recuerda siempre tomar tu hora de almuerzo.

– Al final de tus labores, es importante verificar si cumpliste tus metas del día, de esta forma, puedes reprogramar el día siguiente.


Y los niños?

Todo esto puede resultar manejable, pero cuando los niños del hogar dependen de ti, es todo un reto cumplir las obligaciones, por tanto puedes agregar estos puntos a tu día a día:

Hablar con los niños: Esto aplica para todos, pero obviamente es más comprensible para aquellos mayores de cinco años que pueden comprender tus limitaciones.

Ubicar el lugar de trabajo, según sea tu situación, si te es posible ubicar tu lugar de trabajo distante de los niños, pues mejor, si dispones de ayuda, pero si no es el caso y tienes bebés, lo ideal es ubicar tu oficina cerca de donde puedas crearle un lugar de espacimiento seguro bajo tu vigilancia.

Reorganiza tu horario: Las responsabilidades del hogar, así como las tareas y actividades de recreación de los pequeños deben realizarse una vez terminada las labores. Por esto es importante crear un horario de trabajo.

Margen de error: Como todo en la vida, las planificaciones no siempre se pueden llevar a cabalidad, por tanto, acepta tus limitaciones y pide ayuda si lo necesitas.