El municipio de Villa Jaragua pertenece a la provincia Bahoruco, ubicado al suroeste de esta provincia aproximadamente a 220 kilómetros al oeste de Santo Domingo.

Villa JaraguaVilla Jaragua fue fundada a finales del siglo XIX por varias familias procedentes de Azua. A principios del siglo XX, la parte baja del poblado fue afectada por un terremoto, forzando a los habitantes reconstruirla en tierras más elevadas.

El poblado era anteriormente conocido como Barbacoa.

En 1943, fue otorgado la categoría de distrito municipal y recibió el nombre de Villa José Trujillo Valdez en honor al padre del dictador Rafael Leonidas Trujillo.

En 1963, el nombre fue cambiado a Jaragua en honor al cacicazgo taíno. Recibió la categoría de municipio el 10 de marzo de 1977.

La economía de Villa Jaragua consiste en la agropecuaria, en general en sus cultivos de plátano y café, la avicultura y la crianza de ganado vacuno.

Su principal atractivo turístico es el Lago Enriquillo, el lago más grande del Caribe (375 kilómetros cuadrados) ubicado al sur del poblado. Es un lago de agua salada con la mayor concentración de sal que el agua de mar, y es el hogar de la mayor población de cocodrilos americanos (Crocodylus acutus) en el Caribe.

Sus fiestas patronales son celebradas cada primero de mayo en honor a San José Obrero.

Otros Municipios de la Provincia Bahoruco:

Galván. Este municipio fue anteriormente llamado Cambronal por sus árboles de cambrón que abundaban en el lugar. Su nombre actual es en honor al novelista e historiador Manuel de Jesús Galván (1863-1910) cuya novela Enriquillo ha sido acreditada entre una de las mejores obras literarias dominicanas. Su principales actividades económicas son el cultivo de platanos y uvas y la producción de vinos.

Neyba. El municipio cabecera de la provincia Bahoruco, es uno de los poblados más viejos de la región suroeste cuyos inicios se remontan a mediados del siglo XVI con el nombre de Villa Neyba. La economía de este municipio se sustenta en la agricultura. Su fama en el cultivo de uvas y producción de vinos llevó a la creación de la Feria de la Uva de Neyba que atrae a ambos productores y consumidores extranjeros y locales.