CiberacosoEl ciberacoso o el acoso cibernético es el mal uso de los medios de información digitales para molestar o atacar a una persona o un grupo. Esto incluye amenazas y mensajes sexuales no deseadas que pueden causar baja autoestima, depresión, frustración e inclinación al suicidio.

Con el aumento del uso de la tecnología de la comunicación, el ciberacoso se ha convertido cada vez más común, especialmente entre los adolescentes. La conciencia sobre este tipo de acoso también ha aumentado, debido en gran parte por casos de victimas que se han suicidado.

Algunas organizaciones y escuelas han iniciado programas y campañas que luchan contra el acoso cibernético, aconsejando a victimas y reportar estos delitos a las autoridades.

Según estadísticas recientes, uno de cada tres adolescentes han sido víctimas de ciberacoso. Si su hijo o hija ha sido el receptor de este tipo de atque, hay algunas medidas específicas que debe tomar para discutir el tema con él o ella y prevenir futuros ataques de pueden tener un impacto profundo en su vida.

Esté atento a las señales. El ciberacoso puede ser bastante embarazoso, y a menudo los jóvenes se niegan a revelarlo. Los expertos sugieren que los padres estén atentos de signos como bajas calificaciones, baja autoestima, estrés o negandose a asistir a la escuela o actividades sociales.

Comunicación. Los padres deben sentarse con su hijo o hija y hablar de la experiencia. Preguntale: cómo se siente, qué cree que causó el ataque, sabe quién lo hizo y sí quere tomar represalias. Es importante mostrarle a su hijo que se siente mal por la situación y que no fue su culpa. Es importante trabajar con él o élla para que puede aceptar y poner en práctica estrategias para tratar el tema.

Documentación. Debes imprimir las páginas de redes sociales, correos electrónicos o mensajes de texto que pueden ser útiles para las autoridades en una investigación.

Bloquear el agresor. Debes bloquear el agresor de la lista de teléfonos, las páginas de correo electrónico y las redes sociales de tu hijo o hija. Como los niños a menudo comparten sus contraseñas con amigos, debes cambiar todas las contraseñas y tomar algunas precauciones para prevenir futuros ataques. Llame a tu proveedor de servicio telefonico para ver si tienen disponibles herramientas para regular el uso del teléfono de tu hijo o hija.

Ayuda de la escuela. El acoso cibernético puede involucrar personas en la escuela, y debes notificar a las autoridades escolares de este problema. A menudo pueden bloquear el acceso a Internet en la escuela para minimizar la frecuencia de los ataques. También pueden vigilar por otros casos de violaciónes y tomar las medidas apropiadas.